“Lloré hasta cansarme”: Mujer denuncia que tumba de sus padres fue destruida en cementerio de Valdivia

Una visita que debía ser para recordar terminó en una escena desoladora. Magaly Uribe, vecina valdiviana de 71 años, acudió al Cementerio General para conmemorar el aniversario de su madre, pero al llegar se encontró con una imagen devastadora: las tumbas de sus padres, Luis Uribe y Juana Arcos Oyarzún, junto a las de sus abuelos, estaban destruidas.

“Me encontré con algo tremendamente choqueante, algo de lo que todavía no me puedo recuperar”, relató la mujer, que llegó cerca de las 11:30 al lugar. Según denunció, una empresa contratista —que habría sido convocada para cortar árboles— dejó una estela de daños en distintos sectores del cementerio.

En redes sociales, Magaly compartió su dolor: “Lloré hasta cansarme (…) la tumba de mis padres y abuelos, destrozada, sin ninguna protección”. También criticó la falta de respuestas por parte de la administración del recinto. “No me quisieron dar el nombre de la empresa. Estoy aterrada. Llueve y las tumbas se están llenando de agua”.

Tras esperar más de una hora para hablar con una funcionaria, recibió una escueta respuesta. “Dijeron que iban a responder. La niña de administración fue muy parca al contestarme, me dijo que no sabía nada, que eso lo ve la constructora, y que cuando la empresa contratista pueda, va a arreglar la tumba”.

Sin plazos definidos y con las tumbas aún abiertas, la afectada se cuestiona que “por sanidad no pueden estar así, y ni siquiera se han dignado a poner una tapa provisoria”.

El daño, cuenta, se extiende incluso a tumbas cercanas, como la del doctor Sabat, que también presenta rotura en su base. Mientras tanto, Magaly y su familia enviaron un escrito al municipio y esperan respuesta. También planean contactar a la alcaldesa Carla Amtmann. “Esperamos que nos arreglen como corresponde las tumbas que están destruidas, y lo más pronto posible”.

RioenLinea pidió un pronunciamiento sobre este tema a la Municipalidad de Valdivia, sin embargo, hasta la hora de publicación de este artículo, no han llegado declaraciones.