Julio: Un mes clave para la Doble Vía

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Hace unas semanas lamentamos una muerte en la ruta que une Valdivia con Paillaco. Y cada vez que escuchamos sobre un accidente en esa vía o en la que une a la capital de Los Ríos con Mariquina, pensamos en que ya llevamos décadas hablando de una medida que impactaría profundamente en la solución y que probablemente habría evitado el dolor de decenas de familias: la doble vía en los accesos a Valdivia.

Como Cámara Chilena de la Construcción recordamos haber participado en múltiples reuniones con ministros, autoridades regionales y comunales; haber estado en mesas de diálogo y en instancias con otros gremios y representantes de los vecinos analizando este tema. Y siempre nos surge la misma pregunta ¿Cuánto más tendremos que esperar?

Desde la Dirección General de Concesiones se dio a conocer la ficha técnica del Proyecto Concesión Rutas de Accesos a Valdivia donde además los objetivos de desarrollar esta obra -que involucra 88 kilómetros aproximadamente teniendo en cuenta que incluye las rutas 202 y 206- nos hablan de un cronograma con meses concretos. En ese plan, julio de 2025 es clave.

El próximo mes se debería publicar la licitación de la concesión vial, es decir, que se buscará a la empresa que se haga cargo de la concesión. Esa empresa se haría cargo del diseño, construcción y operación de la obra. Según el cronograma, sería en febrero de 2026 cuando se terminen de recibir las ofertas y en agosto de 2026 cuando se adjudique la concesión. Si todo esto ocurre como plantea la ficha técnica del proyecto, la puesta en servicio de la totalidad de las obras debería producirse en el primer semestre de 2034.

Para muchas familias ya se estará actuando tarde. Sin embargo, como gremio consideramos que es muy importante que esta planificación se logre ejecutar y que durante el tiempo que debamos esperar se trabaje en planes que permitan garantizar que la ruta sea más segura. Es una necesidad transversal para todos los habitantes de Los Ríos, un territorio que necesita avanzar con la concreción de proyectos estratégicos que, lamentablemente, se han visto postergados por demasiados años impidiendo el desarrollo sustentable de la región y, en este caso, la tranquilidad de sus habitantes.